Mendoza avanza hacia la imposición del horario corrido al comercio
Desde el Instituto de Desarrollo Comercial de esa provincia buscan consensuar el cambio con representantes de cámaras departamentales.
La siesta, ese periodo de descanso tan arraigado en nuestra cultura y que muchos aprovechan para cortar el día, parece correr peligro. Es que nuevamente se está debatiendo la incorporación del horario corrido en el comercio mendocino. Para avanzar en este sentido desde el Instituto de Desarrollo Comercial (IDC), dependiente del Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía del Gobierno de Mendoza, organizaron ayer una reunión en La Enoteca con distintos organismos del Estado y cámaras empresarias, entre otros. El objetivo es conocer sus posturas y seguir una serie de pasos hasta llegar a una solución concreta. Desde el organismo oficial proponen llevar a cabo una prueba piloto de horario corrido durante este invierno, tal como sostienen algunos sectores.
“Creemos que ha cambiado el mundo. Cuando se trabaja con otras provincias, prácticamente la siesta ya no existe. Se ha modificado la realidad, tenemos que escucharnos entre todas las partes y ver la posibilidad de avanzar”, manifestó Daniel Dimartino, gerente general del IDC.
Para llevar adelante la modificación horaria aclaró que es necesario estudiar los aspectos legales, logísticos, de transporte, entre otros. “Deberíamos revisar el horario de escuelas y de universidades, pero siempre tendría que ser por consenso”, recalcó.
Con respecto a un avance concreto manifestó: “Hay algunos sectores que plantean hacer una prueba durante el invierno, queremos plantearlo para este invierno para ver cómo resulta y ver si en el verano también se puede hacer”.
Tal como aseguró el gobierno, realizó la semana pasada un sondeo de opinión que arrojó que más del 50% de los consumidores estarían a favor de un cambio al horario corrido. “Entendemos que la gran diferencia la marcan las generaciones más jóvenes”, añadió.
Avance en corto plazo
Alberto Lucero, secretario de la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM), es uno de los que sostiene la idea de avanzar con una prueba en el corto plazo: “Todos los cambios implican crisis, la propuesta es que empecemos probando en el invierno el horario corrido y así veamos en concreto cuáles son los resultados”. Para él, este avance permitirá saber la opinión de los empleados, comerciantes y la sociedad en su conjunto. El secretario recordó que desde hace varios años propugnan por la continuidad de la atención al mediodía por varios motivos: poder favorecer al turismo, evitar la inseguridad y disminuir la cantidad de traslados en el transporte público, entre otros.
Por su parte Aldo Pagano, presidente de la Cámara de Comercio de Las Heras, hizo hincapié en la necesidad de tomar una decisión a corto plazo.
“Hay que resolver por lo menos un modelo que tenga la dinámica que nos permita hacer una prueba y ver los resultados para ver cómo seguimos trabajando”, expuso. Recalcó que la verdadera discusión ronda en torno a un cambio cultural: “Tenemos que ver si realmente estamos dispuestos a llevarlo adelante, porque son de los cambios más complejos”, aseguró. Para el titular de esa Cámara es fundamental dejar la siesta de lado: “Mendoza ha adquirido un volumen de actividades que necesita cambios, lo tenemos que hacer nos guste o no nos guste. Tenemos que ser capaces de introducir modelos culturales que nos permitan una dinámica distinta”, subrayó.
En tanto, Patricia Tahan, representante de la Cámara de Comercio de Luján, reconoció que si bien la medida tiene pros y contras, en los departamentos cuesta más instalar el cambio cultural. “Entonces una propuesta viable es hacer una prueba piloto en Capital y ver cómo los departamentos pueden ir adaptándolo”, dijo.
En contra
Durante la charla en La Enoteca, los expositores debieron colocar una papeleta de colores de acuerdo a su postura y al final de la reunión el resultado fue el siguiente: 9 verdes (a favor), 4 amarillos (postura intermedia) y 3 rojos (en contra).
Asimismo, remarcó que el turista tiene que adecuarse a la ciudad que visita, aunque vislumbró la posibilidad de tener zonas donde el comercio abra en horarios más amplios pensando en los visitantes. Sumó además los derechos adquiridos de los trabajadores y la dificultad de modificarles los horarios.
Antonio Sánchez, tesorero de la Unión Comercial de Maipú, también llamó a no cambiar el horario. “Habiendo realizado unas encuestas locales, la opinión generalizada es que para los departamentos del Gran Mendoza no es beneficioso el horario corrido. Por lo tanto, la opinión es que continuemos como hasta ahora”.
Fuente: Los Andes